martes, 22 de octubre de 2019

¿No lo ves?

¿No lo ves? Yo muero y renazco por tú amor.

¿No lo ves? Yo muero por un gesto de tu parte.

¿No lo ves? Yo anhelo tú querer.

Y es qué, niña mía, la intranquilidad me invade cuando de usted nada sé. Me cómo las uñas. Cierro los ojos y aún así, tras estos parpados, mis pupilas siguen en tu búsqueda.

¿No te enteras? Ya no se como explicarle a estás manos tú ausencia, ya no sé cómo darle a entender a mí piel que tú calor se disipa si de mí, fugaz desapareces.

Y me refiero, niña mía, a ese breve espacio en qué no estás. A esas horas que son como cuenta gotas, que se vuelven en mi contra y amenazan mi ritmo cardíaco.

¿No lo sabes? Te extraño, vaya que te extraño. 

Y es genial ese momento en el que mi teléfono vibra y leo en la pestaña tu nombre. Tú no sabes lo que causas, lo que generas en esta psiquis que no hace más que amarte.

¿No lo ves, niña mía?

No hay comentarios.:

Publicar un comentario